Diner en Blanc

La consigna es vestir de “elegante” blanco, llevar dos sillas blancas, una mesa con mantel blanco, vajilla china, cubiertos, copas de cristal y delicioso “homemade meal”. También alientan la creatividad a la hora de elegir el atuendo a vestir, los accesorios y los centros de mesa. La reunión se realiza una vez al año en un lugar que los organizadores mantienen en secreto hasta tan solo unos minutos antes de la 6 de la tarde (hora de inicio). Se trata del evento “Diner en Blanc” que el pasado 18 de Setiembre cumplió su tercera edición en la ciudad de Nueva York. Esta vez el punto elegido fue el Bryant Park (localizado en la 6ta avenida y calle 42). Anteriormente las reuniones se llevaron a cabo en el Lincoln Center (2012) y en el Battery Park (2011).

La idea del evento surgió hace 25 años en Paris y se viene desarrollando ininterrumpidamente en La ciudad de la Luz desde esa fecha. El concepto: reunirse con amigos y pasar una velada glamorosa y divertida en un blanco inmaculado y con cierto toque “vintage”. Esta idea se  propagó en los últimos tiempos por varias ciudades de Estados Unidos y del mundo: Toronto, Vancouver, Estocolmo, Quebec, Chicago, Atlanta, Boston, Atlantic City, Los Ángeles, New York, Ámsterdam, Montreal, Berlin, por mencionar algunas.

Todo esta rodeado de un halo de misterio desde el comienzo. Primero debes estar inscripto en una lista de espera, o ser invitado por uno de los miembros. Recibes un email una semana antes del evento en la que te advierten que a determinada hora comenzará ese mismo día la inscripción online. A la “hora señalada” resulta que la página esta completamente colapsada por la cantidad de gente que esta intentando registrarse. Este año la lista de espera fue de 45.000 personas, mientras que solo pudieron concurrir a la fiesta 4,000. Si eres lo suficiente perseverante (como yo) al final de una media hora de intentos frustrados logras acceder a la página.  Una vez allí, con el código que ellos mismos te han suministrado en el email, comienzas el proceso de inscripción (para el cual solo tienes 15 minutos), por lo que debes tener todos tus datos y tarjetas de crédito a mano. Es una carrera contra reloj, un tanto estresante, pero con mucho gusto. La idea de poder ser parte de semejante evento lo justifica todo (al menos ese es el mantra que mantienes en tu cabeza para poder continuar). A partir de ese momento comienza otra carrera contra el tiempo. Tienes solamente una semana para toda la logística: conseguir las sillas y la mesa (puedes comprarlas o rentarlas), armar tu “outfit” blanco (cuanto mas excéntrico mejor), organizar la comida que vas a llevar (existe la opción de comprar el catering que ellos ofrecen en su pagina web) y adquirir online las bebidas alcohólicas si es que deseas alguna (esa es la gran diferencia con el evento de Paris, allí tu llevas tu propia bebida, aquí esta vedado el ingreso de bebidas alcohólicas en lugares públicos). Las reglas son algo estrictas, pero la gente parece seguirlas con mucho placer. Al fin de cuentas es un evento único en su estilo y es tan solo una vez al año. La recompensa a tanto trajín: una velada encantadora, en un lugar exclusivo de Manhattan, con personas dispuestas a pasarla bien, un marco increíble, la luna llena pasando por detrás del edificio Chrysler, el imponente Empire State de testigo, la fresca quietud de un atardecer de Septiembre, servilletas blancas agitándose al ritmo de la buena música, buen vino, buena comida, y la sensación de pertenecer a otro mundo. Un mundo en donde nuestros sueños mas locos pueden convertirse en realidad. La posibilidad de vivir una noche mágica una vez al año. Eso es “Diner en Blanc”. Esta vez fue mi primera vez y debo decir que fue maravillosa. Merci beaucoup! Jusqu’a l’annee prochaine! 

The slogan is wearing 'elegant' white, bringing two white chairs, a table with white tablecloth, china crockery, cutlery, wine glasses and delicious " homemade meal”. They also encourage creativity when choosing the outfit to wear, accessories and centerpieces. The meeting is held once a year in a place that the organizers kept secret until just a few minutes before 6 pm (the start time). This is the event " Diner en Blanc " that on 18 September met its third edition in the city of New York. This time the point chosen was Bryant Park (located at 6th Avenue and 42nd Street). Earlier meetings were held at Lincoln Center (in 2012) and the Battery Park (in 2011).

The idea for the event came 25 years ago in Paris and has been developing steadily in the City of Light since. The concept: meet friends and spend a glamorous and fun evening in pure white and with a "vintage “ touch. This idea was propagated in recent years by several cities in the United States and the world: Toronto, Vancouver, Stockholm, Quebec, Chicago, Atlanta, Boston, Atlantic City, Los Angeles, New York, Amsterdam, Montreal, Berlin, to name a few.

All this surrounded by a halo of mystery from the start. First you must be registered on a waiting list, or be invited by a member. You receive an email a week before the event in which they warn you that at a certain time that day begin online registration. At the " appointed time " is that the page is completely collapsed by the amount of people who are attempting to register. This year the waiting list was 45,000, while only 4,000 were able to attend the to the party. If you are persistent enough (like me) at the end of half an hour of failed attempts to access the page you manage. Once there, with the code you have supplied in the email, you start the registration process (for which you only have 15 minutes), so you should have all your data and credit card handy. It's a race against time, a little stressful, but very tasteful. The idea of being part of such an event justifies everything (at least that's the “mantra” that you keep in your head to continue with the task). From that moment begins another race against time. You only have one week to get the chairs and the table (you can buy or rent them), build your " outfit " white (the more eccentric the better), organize the food you're bringing (there is the option to buy the catering they offer on their website) and online purchase alcoholic beverages if you want some (that’s the big difference with the Paris event, there you bring your own drink, here is forbidden the entry of alcoholic beverages in public places). The rules are rather strict, but people seem to follow them with pleasure. Ultimately it is an event unique in style and is just once a year. The reward for so much work: a lovely evening at an exclusive Manhattan spot, with people willing to have fun, amazing frame, the full moon passing behind the Chrysler Building, the Empire State imposing a witness, the cool stillness of a September sunset, waving white napkins to the beat of good music, good wine, good food, and a sense of belonging to another world. A world where our wildest dreams can come true. The possibility of living a magical night once a year. That's " Diner en Blanc “. This time it was my first time and I must say it was wonderful. Merci beaucoup! Jusqu'a l' annee prochaine!